En 1479 la Mancha alta conquense era escenario principal de la guerra civil entre la reina Isabel y uno de los más significados partidarios de Juana «la Beltraneja», el poderoso Marqués de Villena. Durante meses el campamento real estuvo asentado en la villa de Santa María del Campo Rus, asediando el próximo castillo de Garcimuñoz, bastión inexpugnable del Marqués, y será aquí donde nuestro ilustre Jorge Manrique caerá herido, en el lugar que hoy se conoce como “la Cruz de don Jorge”. La agonía y el fallecimiento discurrirán en Santa María del Campo Rus, preciosa villa, que en la actualidad cuenta con un espléndido monumento al poeta y el único Museo existente dedicado monográficamente a su vida y obra. El último vértice del triángulo se cierra en Uclés donde se le dará sepultura y descansan sus restos.